Autora: Érika Rodríguez
Experta en comunicación digital
Lo primero que debes saber como comunicador es que el proceso comunicativo es muy amplio, no basta solo con dar un mensaje. Tener esto en mente es esencial para lograr la comunicación efectiva. La comunicación contiene elementos esenciales que la hacen más efectiva y asertiva. En nuestro proceso de formación hemos aprendido que el planteamiento de ideas cuenta con elementos necesarios para comunicar información; emisor: persona que comunica un mensaje, receptor: es quien recibe la información daba por el emisor, canal: medio por el que se da a conocer un discurso y mensaje: que no es más que la información que el emisor quiere dar a conocer. Con esto en mente se puede lograr la comunicación efectiva. Pero te has preguntado si ¿esto en realidad ayuda con el posicionamiento de tu mensaje?, la verdad para lograr impactar es necesario disponer de elementos más precisos y entender que no solo basta con transmitir información, es necesario crear vínculos con la audiencia para mayor aceptación.
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En Pick – Dream encontrarás cinco recomendaciones para mejorar tu discurso y lograr una comunicación efectiva:
1.No olvides tu cuerpo: La comunicación no verbal es indispensable, recuerda mantener contacto visual con tu público; esto hace tu discurso más convincente. Refleja actitud y entusiasmo con tus gestos, pero no abuses de ellos, sé natural y dinámico para evitar la dispersión de quien te escucha camina alrededor del auditorio para que el foco de atención seas tú. Puedes practicar frente a un espejo y evaluar tus habilidades, así conocerás tu cuerpo y tendrás mayor control sobre él.
2.El tono sí importa: Juega con tus tonalidades de voz para lograr un discurso llamativo. La modulación vocal debe variar, usa tu fuerza sonora para resaltar conceptos. No olvides proyectar tu voz, cada persona en el auditorio quiere escucharte. Juega con tu volumen sonoro, sube y baja el volumen en información importante, esto facilitará el proceso de recepción de quien te escucha. Practica ejercicios de modulación, graba tu discurso y descubre tus destrezas y puntos por mejorar, así hallarás tu mejor técnica.
3.¿Me hablas a mí?: Los elementos verbales son esenciales en cualquier proceso comunicativo, usar las palabras adecuadas ayudan a tener mejor conexión y evitar distracciones. Para lograr un buen manejo de estos debes conocer tu público ¿cómo hablan? ¿qué edad tienen? ¿cuáles son sus gustos?, así tienes claro a quién va dirigido tu discurso y qué personas están interesadas por conocerlo. En ocasiones el uso excesivo de palabras técnicas modifica el mensaje que se tenía planeado y la reacción asertiva del público, para evitarlo debemos estudiar el tema con anterioridad, así nuestra información contará con alto nivel de veracidad y el dominio sobre el tema hará que el proceso comunicativo sea más sencillo.
4.Menos es más: No hables por hablar, ser un buen comunicador implica escuchar a los demás, en comunicación aprendemos que hay una línea entre hablar mucho y saberlo hacer. Sé concreto con tu mensaje sin dejar ideas al aire, no des vueltas sobre un mismo tema, no hagas mayor uso de falacias ni de términos complejos. Piensa como tu audiencia, facilita el proceso intelectual de tu público para evitar ruidos en tu discurso. Sé preciso, habla con la verdad, en ocasiones los nervios nos hacen mentir o exagerar ideas esto hace que tu información pierda credibilidad, para esto es recomendable conocer el tema a profundidad.
5.¿Y los nervios?: Olvidarse de conceptos o temas específicos es normal y tiene solución, para evitarlo usa presentaciones con términos característicos o imágenes relacionadas con temas puntuales. La respiración juega un papel de gran importancia para evitar la dispersión de ideas, los nervios desconcentran nuestra atención haciéndonos olvidar ideas y parecer inseguros, la respiración consciente nos hace relajar nuestro cuerpo y lograr mayor fluidez y control sobre él. Es importante que practiques las veces que sean necesarias para lograr elocuencia en el mensaje, puedes usar técnicas de relación de términos, en donde asocias unos conceptos con otros para evitar olvidarlos.
Dominar estos puntos puede no ser sencillo, requiere de práctica, pero una vez logres hacerlo tu comunicación será más efectiva y conseguirás elevar tu nivel como conferencista. Estos elementos aumentarán tu confianza y fortalecerán tus destrezas comunicativas, pero no funcionan solo para comunicadores, al contrario la comunicación tiene un papel importante en todas las ramas de la educación y la vida profesional como las entrevistas de admisión universitaria o entrevistas laborales es necesario contar con un alto desempeño comunicativo.
En la vida diaria es esencial contar con habilidades comunicativas, pues continuamente enfrentamos exposiciones de conocimientos en el caso de los estudiantes y presentación de ideas o informes en el ámbito laboral y la comunicación es la base para que nuestras ideas sean entendidas y acogidas de la forma adecuada por los receptores. La comunicación participa de forma indirecta en muchos casos; por ejemplo, en una galería de arte se exponen obras que tienen una sola intención, transmitir un mensaje por medio de un lienzo, fotografía o exposición, este elemento hace parte del proceso comunicativo.
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Es indispensable que en el proceso comunicativo haya retroalimentación, es decir, tener contacto con el público, saber en qué piensa, qué ideas o preguntas tiene, si relaciona mi tema con otro para conocer si hay claridad en lo que digo. Un ejercicio que funciona son las preguntas sobre lo que estoy hablando, preguntar qué ideas hay sobre mi tema, si lo conocen o está aislado de ellos. Este ejercicio crea empatía entre el emisor y el receptor, creando confianza entre ambos y evitando desinterés en la presentación.