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Las personas que pertenecen a organizaciones humanitarias que ayudan deben aprender a entender que el entorno geográfico y social en el cual se mueven es de gran importancia a la hora de tener éxito en las acciones que implementen. Por ejemplo, en áreas remotas del África no es lo mismo realizar intervenciones humanitarias que en partes urbanizadas. Si te lo preguntas, un grupo de geólogos y médicos profesionales unieron sus esfuerzos para transformar la vida de personas que vivían en entornos remotos, todo a través de la puesta en práctica de sus conocimientos, junto con su vocación de servicio social. ¿Cómo lo hicieron?
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Todo empezó cuando este grupo de profesionales decidió hacerle frente a un desafío que tuvo que ver con una intervención médica humanitaria en el Distrito de Whantoa en el estado de Etiopía, Gambella. Este lugar es uno de los más remotos de África, ya que posee muy poca infraestructura y los servicios públicos son casi que escasos. Para que entiendas la dimensión de esta iniciativa, debes saber que esta región de Etiopía se encuentra rodeada por 3 ríos.
A esto sumado que la práctica del pastoreo o pastoralismo es un estilo de vida que sé práctica por la mayoría de habitantes de Etiopía y aunque el pastoreo es uno de los pocos medios de subsistencia de estos habitantes, esto estaba generando que la salud de las personas fuera de mal en peor. ¿Por qué? Pues debido a las grandes caminatas en busca de animales, las horas enteras debajo del rayo del sol, da deshidratación de la piel por la polución y el calor; y eso sin contar la alta probabilidad de que los pastores puedan contraer enfermedades infecciosas como la tuberculosis, infecciones respiratorias y gastrointestinales, entre otras.
Por lo tanto, a partir de la investigación de este grupo de profesionales en geología y medicina, se recopilaron y se analizaron datos por el personal involucrado en la misión humanitaria, todo para llegar a ciertas conclusiones que pudieran beneficiar a esta comunidad tan afectada. En primer lugar, concluyeron que los periodos estacionales influyen en gran manera en la prosperidad de los cultivos y en la salud del ganado. Por ejemplo, se determinó que en febrero y marzo las condiciones de sequía obligaban a estos habitantes a abandonar su hogar de manera indefinida.
Esta investigación ayudó a determinar que los patrones de asentamiento temporales fueran identificados por la misión humanitaria y así pudieran llegar por medios fluviales a atender a estas comunidades tan desfavorecidas y aunque te parezca simple, estos estudios tuvieron una duración de 5 meses. En conclusión, las personas que apuestan por el bienestar de sus semejantes se vieron resumidas en el caso de éxito anterior.
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