Autor: Juan Pablo Aguilar
Experto en comunicación digital
¿Cuántas veces te ha tocado levantarte temprano para hacer algo que no te gusta?. El madrugar es algo que estamos destinados a hacer, desde que somos unos niños al ir a la escuela o alguna cita médica, siempre se nos ha impuesto levantarnos temprano para realizar múltiples actividades. Inclusive en el lenguaje popular hemos escuchado refranes tales como “al que madruga Dios le ayuda” o “quien quiera prosperar que empiece a madrugar”. Frases que por lo general las oímos de nuestros padres o maestros, quienes nos han inculcado que madrugar nos hace ser personas mas productivas. Pero ¿Por qué no nos gusta levantarnos temprano?.
Conoce más: ¡A madrugar más! ¿Cuáles son los beneficios de este hábito?
Podemos deducir que una de la razones por las cuales no nos gusta madrugar, es porque cuando éramos pequeños o inclusive ya de grandes, lo hacemos porque tenemos una obligación, ya sea que tengamos que ir al colegio a hacer cosas que no nos gustan o cuando estamos en la universidad y nos trasnochamos haciendo trabajos que son complejos o también en algun trabajo que no nos guste. Pero ¿Qué pasaría si te dijera que madrugar tiene muchos beneficios para tu salud mental y física?.
Madrugar nos puede ayudar a curar la depresión. “Aproximadamente, 3/4 de los pacientes deprimidos tienen síntomas de insomnio, y la hipersomnia (somnolencia excesiva durante el día) está presente en alrededor del 40% de los adultos jóvenes deprimidos y el 10% de los pacientes mayores”. Esto según el Centro Nacional para la información de Biotecnología. Al madrugar podemos tener una mejora en nuestro estado de ánimo, ya que madrugando podemos tener control en nuestro buen dormir.
Otro de los beneficios de levantarse temprano es que puedes mejorar tu productividad tanto académica como laboral. “Las personas que alcanzan su punto máximo de rendimiento por la mañana están en mejor posición para el éxito profesional”. Esta fue la conclusión a la que llegó el estudio de la revista Harvard Business Review donde se revela que estas personas son mucho más proactivas que las personas que llegan a su mejor momento de productividad en la noche.
Adicionalmente madrugar nos ayuda a ser personas más organizadas, al levantarnos temprano podemos optimizar nuestro tiempo, con el fin de realizar esas actividades las cuales podemos disfrutar al hacerlas. Por ejemplo; hacer ejercicio, cantar, meditar, dibujar, incluso hasta puedes bailar si así lo deseas.
Te podría mencionar miles de razones por las cuales una madrugada te ayudará a tener un día activo y lleno de productividad. Pero la cuestión es ¿por qué nos cuesta tanto madrugar?. Una de las razones por las cuales pasa esto, es porque no descansamos bien. El buen dormir es otro de los beneficios que obtendrás si te levantas temprano, sin embargo ¿Cómo podemos hacerlo?
Para empezar a madrugar, lo primero que debes plantearte es la razón principal por la cual te levantas todos los días. La mejor recomendación para empezar es con pasos pequeños, establece objetivos a corto plazo los cuales puedas desarrollar con facilidad. También puedes comenzar programando las actividades que vas a hacer al otro día, empezando por la que mas te gustaria hacer de primero. ¿Cual de es la actividad que más te gusta hacer durante el día?
Luego de programar tu siguiente día, es muy importante que empieces a descansar para afrontar el nuevo día que vas a tener, por eso lo más recomendable es que trates de acostarte lo más temprano posible. Trata de tener las pantallas apagadas y que el despertador sea tu mejor amigo y prepárate para tener un día lleno de energía.
Según la guía para despertarse temprano realizada por Matias Salom, se necesitan cuatro motivos para poder levantarse temprano. Te lo explicaremos en la siguiente tabla:
Empezar el día con una victoria |
Las primeras horas son las más productivas |
Despertar temprano ayuda a tener hábitos saludables |
Levantarse antes que los demás, te da horas “hiper-tranquilas “ |
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A parte de esta tabla la guía también nos comparte varios ejercicios para poder adquirir el hábito de madrugar. Uno de ellos consiste en respondernos las siguientes preguntas: ¿Cómo imaginas que serían tus días si arrancaras más temprano?; ¿Qué actividades realizarías en las horas que ganas y por qué son importantes para ti?; ¿Cómo cambiaría el ritmo con que logras resultados en proyectos personales si te despertaras antes?. Medítalas con tiempo y cuando ya tengas una respuesta clara.